Estoy inspirada. He visto esta foto y he pensado que sería lindo por mi parte expresar lo que siento al verla. Creo que os dais cuenta solitos; son dos personas, dos chicos, dos rostros que muestran el bien estar al estar tan cercanos, una sonrisa y una mueca que muestran felicidad. Podría seguir, pero voy a ir al grano. Ni si quiera recuerdo cuáles fueron nuestras primeras palabras al conocernos, solo sé que plasmé mi atención en ti, Ayose, y luego en ti, Dani. Sois tan puros, tan expresivos… sois de los pocos que me han emocionado con una foto, un vídeo, una canción… esa canción que dice “y aunque se pase toda mi vida yo te esperaré”. Algún día veré que no sois un cuento chino, que sois de carne y hueso… así que yo esperaré, lo que haga falta. Habéis superado miles de cosas que aunque no me las hayáis contado sé que están ahí, porque no es fácil mantener lo que habéis creado, que por cierto, es hermoso. No quiero que cambiéis, no quiero que me faltéis, no quiero que abandonéis ese pedacito de mí que os regalé sin pediros nada costoso a cambio… solo os pido que no me saquéis de vuestras mentes, que no olvidéis que la distancia no se mide en kilómetros, si no con el corazón. Agradeceros vuestros consejos, vuestra paciencia, vuestra atención y, sobre todo, vuestro cariño. Sé que ya no hablamos tanto como antes, pero se avecina el esperadísimo verano. Recordaros de vez en cuando (muy de vez en cuando) me hace sentirme un poco más optimista. Era eso chicos, os adoro.
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